La controversial influencer dominicana Mami Jordan sorprendió a todos al mostrarse completamente diferente a como suele hacerlo en redes sociales. Esta vez, lejos de los escándalos, las controversias y los comentarios explosivos, la creadora de contenido fue captada en una iglesia, llorando desconsoladamente mientras aseguraba que había tenido un encuentro íntimo con Dios.
📌 IMPORTANTE: El video relacionado a esta historia lo encontrarás al final del artículo.
Durante la transmisión en vivo, Mami Jordan se mostró conmovida, con lágrimas corriendo por su rostro y las manos alzadas al cielo. Entre sollozos expresó que sentía que “Dios la había tocado” y que llevaba tiempo buscando ese momento de paz que finalmente había llegado. Su video rápidamente se volvió viral, generando reacciones mixtas entre sus seguidores y otros internautas.
“Yo lo estaba buscando y Él me encontró”
Con una voz quebrada y un tono completamente diferente al que suele usar, Mami Jordan dijo en medio del culto:
“Yo estaba buscando un encuentro con Dios, quería sentirlo de verdad… y hoy lo tuve. Sentí una paz que no puedo explicar, una fuerza que no viene de este mundo.”
Estas palabras marcaron un giro inesperado en la vida pública de la influencer, quien durante años ha estado en el centro de la polémica por su estilo directo, su lenguaje fuerte y sus conflictos con otras figuras del entretenimiento urbano.
Según testigos, el momento se vivió durante un servicio religioso realizado el pasado fin de semana en una iglesia del Gran Santo Domingo. Varios asistentes grabaron el instante en el que Mami Jordan, con los ojos cerrados, lloraba y oraba de rodillas, pidiendo perdón y agradeciendo por haber sentido la presencia de Dios en su corazón.
El momento que conmovió a las redes
Minutos después de la publicación, los videos comenzaron a circular en TikTok, Instagram y Facebook, acompañados de mensajes de esperanza. Muchos usuarios expresaron que se sintieron inspirados al verla en ese estado de vulnerabilidad y reflexión.
Comentarios como “Dios hace cosas grandes cuando uno menos lo espera” o “Nadie está tan lejos como para que Dios no lo alcance” se repitieron cientos de veces en las publicaciones.
Incluso figuras del medio urbano, con quienes antes había tenido diferencias, reaccionaron al video mostrando apoyo. Algunos aseguraron que “Mami Jordan está viviendo un proceso de transformación” y que lo importante ahora es que mantenga esa conexión espiritual que tanto buscaba.
Un cambio que muchos esperaban
Durante años, Mami Jordan ha sido conocida por su carácter explosivo, su sentido del humor y sus controversias con figuras del entretenimiento. Sin embargo, también ha mostrado en varias ocasiones su lado humano y las heridas personales que arrastra desde su infancia.
En diferentes entrevistas ha confesado haber tenido una vida difícil, marcada por la pobreza, el rechazo y los errores del pasado. Ahora, su presencia en una iglesia, llorando y hablando de Dios, fue interpretada por muchos como el inicio de una nueva etapa.
Una seguidora escribió:
“A veces, los que más parecen estar perdidos son los que más necesitan un abrazo de Dios. Verla así me rompió el corazón.”
Otros usuarios, por su parte, reconocieron que se trata de un paso valiente, considerando que no es fácil abrirse públicamente de esa manera, sobre todo cuando se ha construido una imagen tan polémica en las redes.
“Quiero ser mejor, por mí y por mi hijo”
En el video, Mami Jordan también hizo referencia a su hijo, a quien ha mencionado en diversas ocasiones como su mayor motivación para cambiar. Entre lágrimas, dijo:
“Dios sabe que mi corazón está cansado de luchar sola. Yo quiero ser mejor, por mí, por mi hijo y por todos los que me han amado de verdad.”
Estas palabras conmovieron profundamente a sus seguidores, quienes recordaron que ella ha enfrentado múltiples batallas personales y legales, pero siempre se ha levantado con determinación.
Ahora, la influencer asegura que este nuevo encuentro con la fe representa “un antes y un después” en su vida. Según sus propias palabras, planea enfocarse más en su bienestar espiritual y dejar atrás todo lo que le haya causado dolor.
Reacciones del público
Las redes se llenaron de mensajes de apoyo. Algunos fans dijeron que “esta es la Mami Jordan que todos queríamos ver”, mientras otros expresaron escepticismo y pidieron que el cambio sea real y duradero.
Más allá de las opiniones divididas, lo cierto es que la escena generó una conversación profunda sobre la posibilidad de redención, el perdón y la importancia de la fe.
Incluso varias páginas cristianas compartieron el video, resaltando que “Dios no elige a los perfectos, sino a los dispuestos”, alentando a los creyentes a orar por la transformación de la influencer.
Un nuevo propósito
Al finalizar el servicio, se le vio abrazando a varios miembros de la congregación, quienes la consolaron y oraron con ella. Según fuentes cercanas, Mami Jordan habría manifestado su deseo de continuar asistiendo a la iglesia y participar en actividades comunitarias.
Sus seguidores aseguran que este puede ser el comienzo de una nueva etapa, donde la influencer encuentre el equilibrio entre su carrera digital y su vida espiritual.
Si algo quedó claro después de este emotivo momento, es que detrás de la figura mediática y las controversias, hay una mujer que está buscando sanar y reencontrarse con ella misma.
Un mensaje que dejó huella
Más allá de la farándula, el llanto de Mami Jordan en la iglesia se convirtió en un símbolo de vulnerabilidad, pero también de esperanza. Su historia demuestra que ninguna persona está exenta de buscar a Dios, sin importar lo que haya hecho o cómo sea percibida por los demás.
Con voz temblorosa, la influencer cerró el video diciendo:
“Gracias, Señor, porque me diste la oportunidad de sentirte. No soy perfecta, pero hoy sé que Tú estás conmigo.”
Miles de personas compartieron el clip con frases como “Dios puede cambiar cualquier corazón” y “Cuando Él toca tu vida, no hay vuelta atrás.”
🎬 Mira el video del momento en que Mami Jordan llora en la iglesia y asegura haber tenido un encuentro íntimo con Dios: